Hasta hace poco, los gobiernos progresistas de América Latina parecían imbatibles. La imagen regional actual, con la crisis de Brasil en el centro, es muy distinta. Los motivos de este retroceso hay que buscarlos en factores económicos, en una falta de imaginación para responder a los problemas y en la dificultad para sustituir los liderazgos populares.
*Periodista.