Los desastres humanitarios no son tan desastrosos para todo el mundo. Gigantes del amoblamiento, como Ikea, vendedores de tarjetas de débito… Las empresas se precipitan cada vez más en pos de los beneficios de “la industria de la ayuda”, cuyo volumen anual supera los 25.000 millones de euros.
La lógica empresarial invade los campos
Información adicional
Autor/a:
País:
Región:
Fuente: