“Los combustibles fósiles ayudaron a crear tanto la posibilidad de la democracia moderna como sus límites.”
Timothy Mitchell, Carbon Democracy, 2011 (1)
¿Qué visiones de un futuro sin combustibles fósiles están emergiendo desde los lugares históricamente más afectados por la explotación y producción de petróleo en el Perú? Tal como nos recuerda el epígrafe de este texto, el mantenimiento de los acuerdos actuales para la producción global de petróleo, un recurso esencial para el crecimiento de las economías industriales y la expansión de la democracia en estos países (2), ha requerido constantemente el uso de la violencia y otras formas no democráticas e injustas en las zonas de extracción. Sin embargo, estas zonas de sacrificio (3), inherentes a los sistemas energéticos basados en combustibles fósiles, se han convertido también en espacios de resistencia y de apuesta por la dignidad de la vida, a pesar de la violencia lenta (4) y otras formas de devastación causadas por la industria petrolera (5/6).
Actualmente, el 39 por ciento del petróleo producido en Perú se extrae de la Amazonía, 12 por ciento del zócalo marino de la costa norte (offshore) y el 49 del suelo del norte del país (7). Aunque el petróleo extraído de la Amazonía representa apenas el 0.02 por ciento de la producción mundial (8), los efectos de esta actividad en las vidas y territorios de las comunidades indígenas son emblemáticos del poder destructivo de esta industria extractiva. Desde que inició la explotación petrolera en la Amazonía peruana hace cincuenta años, las prácticas de la industria han afectado directamente la salud y los medios de vida de las comunidades indígenas. La contaminación por petróleo y otros químicos, debido a 817 derrames registrados oficialmente desde 1997 (9), ha afectado ríos y suelos, disminuyendo la calidad del agua y deteriorado la biodiversidad, lo que a su vez impacta la pesca y la agricultura, actividades fundamentales para la subsistencia de estas comunidades. La deforestación para la construcción de infraestructura, como carreteras, plataformas de perforación y tuberías, también ha fragmentado hábitats y afectado la biodiversidad (10).
De manera similar, la extracción petrolera ha transformado radicalmente el paisaje socioecológico del territorio de las comunidades de pescadores artesanales de la costa central y norte del Perú, quienes han sufrido los impactos de los derrames de petróleo, tanto en la extracción del zócalo marino (offshore) como en las operaciones de refinamiento (11). Los derrames y la liberación de químicos tóxicos han afectado directamente los ecosistemas marinos, su biodiversidad y la salud de las especies marinas, incluyendo aquellas fundamentales para la pesca artesanal. Notablemente, en 2021, un derrame de aproximadamente 12,000 barriles de petróleo de un buque que abastecía a la refinería de la Pampilla, frente a la costa del Callao (12), además de impactos ambientales de una magnitud desconocida hasta hoy, llevó al cierre de una extensa zona de pesca y la pérdida de mercados e ingresos para más de 60,000 pescadores (13). Estos impactos continúan sin remediarse hasta la actualidad (14).
¿Cómo conceptualizar, tal como nos exige Larsen (15), este encuentro de lo “geopolíticamente importante con lo socialmente insignificante” que se materializa a través de la vida y relaciones que se (re)articulan a través del petróleo? Un primer elemento útil para este análisis es la narrativa del poder estatal-colonial (16/17) que coloca al petróleo como un patrimonio nacional necesario para el desarrollo, legitimando así el sacrificio socioambiental de otras formas de vida menos valiosas según el discurso oficial (18), como las comunidades indígenas o las comunidades de pescadores artesanales. Esta narrativa, que promueve la idea de que el petróleo es esencial para sostener lo fundamental de la nación peruana y que minimiza, a la vez, las voces y derechos de las comunidades afectadas de las zonas de extracción, ha prevalecido desde el inicio de la explotación del primer pozo petrolero de Sudamérica en Zorritos, en la costa norte peruana, en 1863 (19).
Esta situación, que ha llevado a la marginalización de grupos vulnerables, quienes ven sus territorios y modos de vida amenazados por las actividades petroleras, es también muy ilustrativa de lo que Jason Moore denomina como las “fronteras de mercancías” (commodity frontier), o de las formas en las que el capitalismo, en su búsqueda de crecimiento y acumulación, transforma las relaciones sociales y ecológicas como primer paso para su expansión hacia zonas anteriormente inaccesibles. Dichas transformaciones, como señala Moore, ocurren precisamente mediante la explotación y desvalorización tanto de los seres humanos como del resto de la naturaleza, y reconfiguran constantemente las fronteras económicas y ecológicas del planeta (20).
En efecto, desde el año 2023, Perupetro, la agencia pública encargada de promover la inversión para la exploración y explotación de hidrocarburos, ha promocionado nuevas áreas para la exploración petrolera, tanto en la Amazonía como en el mar de su país. No es casual, entonces, que estas áreas promocionadas se superpongan en más de 4 millones de hectáreas de territorios indígenas (21), así como con una reserva territorial que alberga población nativa en aislamiento voluntario (22).
En Perú, las injusticias y los daños derivados del extractivismo energético del petróleo son ampliamente conocidos y, lamentablemente, no dejan mucho espacio para pensar en un futuro más optimista. Sin embargo, a pesar de la situación de limitado acceso a servicios básicos, necesidades materiales y presiones externas, las estrategias de las comunidades indígenas para enfrentar la explotación petrolera son complejas y no se limitan únicamente a la resistencia o aceptación. En un contexto neoliberal, donde las corporaciones petroleras se legitiman al ofrecer una alternativa frente a la ausencia del Estado (23), las comunidades indígenas deben adaptarse y buscar formas de coexistir con la industria petrolera (24). Esta ambivalencia, como la denomina Cepek (25), implica también que las comunidades utilicen las negociaciones para asegurar ingresos y servicios que mejoren sus condiciones materiales, mientras luchan por preservar sus formas de vida y territorios (26).
La situación descrita revela una historia de demandas, resistencia y disputas colectivas frente al abandono del petróleo. Esta historia, que precede y aún se mantiene alejada de los debates globales sobre la transición energética, nos invita a considerar el abandono de los combustibles fósiles como un proceso fundamentalmente político. Este proceso está motivado tanto por preocupaciones climáticas como no climáticas (27) y está profundamente atravesado por relaciones de poder. Es decir, no debe ser visto simplemente como un cambio socio-tecnológico hacia una matriz energética global libre de carbono. Por el contrario, para que este proceso sea verdaderamente justo para las comunidades afectadas, es esencial que evite activamente la creación de zonas de sacrificio y conflictos socioambientales, y aborde las causas fundamentales de la crisis climática.

En las regiones costeras (28) y amazónicas (29), si bien el fin de la industria petrolera eliminará una amenaza ambiental significativa para los socio-ecosistemas que sustentan a las comunidades indígenas y de pescadores, no garantizará la reparación ambiental de los impactos históricos a estas comunidades, sin contar los desafíos económicos que implicará reducir las oportunidades y los ingresos fiscales para estas áreas (30).
Por tanto, la justicia ambiental debe ser un componente central en la descarbonización de la matriz energética global. Esto no solo implica la remediación ambiental de las áreas contaminadas en las comunidades que han soportado los costos de la explotación petrolera, sino también la compensación económica (31) y el apoyo para la reconstrucción de sus medios de vida. Es esencial que estas comunidades sean las primeras en beneficiarse de la transición hacia energías más limpias y sostenibles, con la participación activa de diversos actores y el reconocimiento de su diversidad.
La transición hacia una matriz energética global libre de fósiles podría ser una oportunidad crucial para corregir injusticias históricas y construir un futuro más inclusivo y plural. Para lograrlo, es necesario integrar la reparación en el proceso de transición energética y promover una mayor justicia a lo largo de todo el ciclo de vida de la producción y consumo de energía. De este modo, se podría contribuir a la creación de un sistema energético radicalmente democrático, que no eclipse las formas de creatividad política ni las preocupaciones sociales, políticas y económicas de las comunidades de pescadores de la costa y de las comunidades indígenas de la Amazonía peruana, permitiéndoles recuperar sus territorios y continuar con sus formas de vida en un mundo post-petróleo. ν
1. Mitchell, T. (2011). Carbon Democracy: Political Power in the Age of Oil. Verso Books.
2. Huber, M. (2013). Lifeblood: Oil, Freedom, and the Forces of Capital. University of Minnesota Press.
3. Quist, L. M. (2019). Fishers’ knowledge and scientific indeterminacy: contested oil impacts in Mexico’s sacrifice zone. Maritime Studies, 18(1), pp. 65-76.
4. Nixon, R. (2013). Slow Violence and the Environmentalism of the Poor. Harvard University Press.
5. Andrews, N., Bennett, N. J., Le Billon, P., Green, S. J., Cisneros-Montemayor, A. M., Amongin, S., … & Sumaila, U. R. (2021). Oil, fisheries and coastal communities: A review of impacts on the environment, livelihoods, space and governance. Energy Research & Social Science, 75, 102009.
6. Watts, M. (2004). Resource curse? Governmentality, oil and power in the Niger Delta, Nigeria. Geopolitics, 9(1), pp. 50-80.
Finer, M., Jenkins, C. N., Pimm, S. L., Keane, B., & Ross, C. (2008). Oil and gas projects in the western Amazon: Threats to wilderness, biodiversity, and indigenous peoples. PLoS ONE, 3(8), e2932. https://doi.org/10.1371/journal.pone.0002932
7. Perúpetro. (2024). Estadística mensual de hidrocarburos – diciembre 2024. Recuperado de https://www.perupetro.com.pe/wps/wcm/connect/corporativo/176635f3-b4fc-4175-81b2-9e5b53bf7886/Estadistica+Mensual+-+Diciembre+2024.pdf?MOD=AJPERES
8. International Energy Agency (IEA). (2025). World Energy Outlook 2025. IEA Publications.
9. León Cépedas, A., Zúñiga Lossio, M., Díaz Avalos, D., & Grupo de Trabajo sobre Impacto de los Hidrocarburos (Perú) (2024). Las sombras de los hidrocarburos: informe III sobre emergencias ambientales, pasivos, procesos de remediación entre los años 1997-2023 en el Perú y reflexiones sobre alternativas energéticas (Primera edición). Coordinadora Nacional de Derechos Humanos.
10. Finer, M. et. al, op. cit.
11.Sánchez Canales, M., & Villalobos Porras, E. (2022). “El impacto de la actividad extractiva de hidrocarburos en la pesca artesanal”. Revista Kawsaypacha: sociedad y medio ambiente, (9), pp. 56-79.
12. Bravo, J., Chirinos, A., Fernández-Maldonado Mujica, E., Mujica, J., Sousa, E., & Silva Monroy, I. (2023). Repsol: una catástrofe que se pudo evitar impactos del derrame de petróleo en el mar peruano y en los derechos de la población en Ventanilla (Primera edición). CooperAcción EarthRights International (ERI) Federación Internacional por los Derechos Humanos (fidh) Centro de Políticas Públicas y Derechos Humanos (Perú EQUIDAD).
13. Leyva, A., León, A., y Zúñiga, M. (2025). ¿Repsol limpió el desastre? Situación actual y retos pendientes para la recuperación de la vida marina a tres años del derrame de petróleo. Cooperacción.
14. Ibídem.
15.Larsen, P. B. (2015). Post-frontier resource governance: Indigenous rights, extraction and conservation in the Peruvian Amazon. Palgrave Macmillan. https://doi.org/10.1057/9781137381859
16. Mignolo, W. D. (2007). DELINKING The rhetoric of modernity, the logic of coloniality and the grammar of de-coloniality. Cultural Studies -Andover-, 21(2-3), 449–514.
17. Mignolo, W. (2012). Local histories/global designs: coloniality, subaltern knowledges, and border thinking (Paperback reissue). Princeton University.
18. Quist, L. M. , op. cit.
19. Bolaños, R. (2017). “Reseña histórica de la exploración por petróleo en las cuencas costeras del Perú”. Boletín de la Sociedad Geológica del Perú, 112(1), 001-013.
20. Moore, J. W. (2021). Capitalism in the Web of Life: Ecology and the Accumulation of Capital. Verso Books.
21. Hurtado, J. (2023, mayo 14). “Nuevas áreas promocionadas por Perupetro se superponen a 435 comunidades y dos reservas indígenas”. Ojo Público. Recuperado de https://ojo-publico.com/4416/nuevas-areas-que-promociona-perupetro-se-superponen-435-comunidades
22. Sierra Praeli, Y. (2025, marzo 19). Pueblos indígenas denunciaron ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos la superposición de nuevas áreas petroleras en sus territorios. Mongabay Latam. Recuperado de https://es.mongabay.com/2025/03/pueblos-indigenas-denunciaron-superposicion-areas-petroleras-peru/
23. Larsen, P. B. (2017). “Oil territorialities, social life, and legitimacy in the Peruvian Amazon”. Economic Anthropology, 4(1), pp. 50-64.
24. Orta-Martínez, M., & Finer, M. (2010). “Oil frontiers and indigenous resistance in the Peruvian Amazon”. Ecological Economics, 70(2), pp. 207-218.
25. Cepek, M., & Guerra, B. (2018). Life in oil: Cofán survival in the petroleum fields of Amazonia. University of Texas Press.
26. Ibídem.
27.International Institute for Sustainable Development (IISD). (2024). Transitioning Away From Oil and Gas: A production phase-out primer. International Institute for Sustainable Development (IISD).
28. Andrews, N., Bennett, N. J., Le Billon, P., Green, S. J., Cisneros-Montemayor, A. M., Amongin, S., … & Sumaila, U. R. (2021). Oil, fisheries and coastal communities: A review of impacts on the environment, livelihoods, space and governance. Energy Research & Social Science, 75, 102009.
29. Orta-Martínez, op. cit.
30.Laastad, S. G. (2021). The Janus face of local extractivism. The Extractive Industries and Society, 8(2), 100903.
31. Alfaro, K., (2022) Reconocer el Daño. Una valoración económica del derrame de petróleo en las comunidades nativas de Cuninico, San Francisco, Nueva Santa Rosa y Nueva Esperanza. IDL y Oxfam.
* Oficial de Proyectos en Justicia Ambiental y Climática. Oxfam en Perú.
Artículos relacionados
